Los encuentros, explicó, servirán para acordar criterios generales para la apertura de la discusión salarial con docentes y empleados públicos.
El gobernador Miguel Lifschitz iniciará en breve una ronda de conversaciones informales con los sindicatos estatales de cara a la apertura de las paritarias para fijar la pauta de aumento salarial de este año. «En las próximas semanas empezaremos los diálogos con los gremios hasta que tengamos acordados criterios generales que no sólo tienen que ver con los docentes sino también con el resto de los trabajadores públicos del Estado», apuntó el primer mandatario santafesino.
Los dirigentes de los sindicatos docentes, Amsafé y Sadop, reclamaron ayer públicamente que se pongan en marcha las conversaciones salariales durante la semana próxima. Según advirtieron, el comienzo del diálogo «no puede pasar de los primeros días de febrero» para, de esta forma ,»llegar a tiempo» al inicio del ciclo lectivo, previsto para el próximo 6 de marzo.
Los dos gremios del magisterio plantearon que en la mesa de discusión deben estar presentes no sólo las previsiones inflacionarias para el 2017, sino también la diferencia entre el último incremento obtenido por el sector docente y el aumento del costo de vida registrado durante el año pasado.
Este avizora ser uno de los núcleos más duros de la discusión. De esta forma, la demanda de los sindicatos se ubicaría por encima del 30 por ciento.
Pero no sólo los maestros empezaron a reclamar la apertura de paritarias. El titular de Upcn, Jorge Molina, consideró que los estatales estaban «listos para sentarse a hablar ahora mismo». Y desde el Sindicato Municipal de Rosario también salieron ayer a marcar la cancha.
En el entorno del gobernador se mostraron sorprendidos por el planteo de los sindicatos. Según explicaron, aún no se formalizaron los pedidos de audiencia ni los acercamientos previos que tradicionalmente marcan el inicio de cada negociación.
Fue Lifschitz el encargado de tomar el tema y anunciar que en las próximas semanas se pondrían en marcha las consultas previas a que el Ministerio de Trabajo provincial convoque formalmente a la discusión salarial.
En diálogo con LT3, el gobernador apuntó que el objetivo de estas reuniones con los referentes de los distintos sindicatos es «acordar criterios generales» para el desarrollo del diálogo formal, que se iniciaría de manera paralela con los trabajadores de la educación y con los empleados de la administración pública provincial nucleados en Upcn y ATE.
Ni piso, ni techo
Los sindicatos santafesinos tomaron distancia del acuerdo salarial pactado en la provincia de Buenos Aires (del 18 por ciento, pagadero en cuatro cuotas) y criticaron con dureza la pretensión del gobierno nacional de fijar un techo del 20 por ciento a la puja por salarios.
El gobernador evitó algún número en torno al cual debería girar el diálogo. No obstante se mostró «totalmente abierto para conversar y analizar distintas alternativas» relacionadas con la demanda de recomposición salarial presentada por los sindicatos.
«No hay ninguna cifra que nosotros hayamos definido, vamos a empezar a estudiar y analizar la situación ahora, en el mes de febrero. Y a partir de allí empezaremos diálogos informales con distintas organizaciones gremiales», señaló.
Por los medios
Durante la semana pasada, en los medios nacionales circularon con insistencia versiones relacionadas con la proximidad de una reunión entre un grupo de gobernadores para acordar la posición que asumirán en las próximas paritarias docentes y, al mismo tiempo, unificar reclamos en torno a la coparticipación.
En este grupo se mencionaba al gobernador Lifschitz, entre otros mandatarios provinciales como Domingo Peppo (Chaco), Hugo Passalacqua (Misiones), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Juan Manuel Urtubey (Salta) o Juan Schiaretti (Córdoba). Sin embargo, Lifschitz negó ser parte el convite. «Me enteré por los medios», sostuvo.
Según explicó, en la discusión con los sindicatos docentes «cada provincia tendrá su criterio, porque el gobierno nacional anunció que en esta oportunidad no va a convocar a la paritaria nacional como ocurría todos los años, y que servía como referencia para las provincias».
En alerta y movilización
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