El norte santafesino nuevamente relegado y abandonado

Las listas de candidatos a Diputados Nacionales optaron por los hombres del sur santafesino y no habrá ninguna posibilidad de que el norte tenga un representante en el Congreso.

Todas las especulaciones quedaron en la nada. El norte santafesino fue nuevamente relegado a lugares sin expectativa en las listas de candidatos a Diputados Nacionales. El discurso de «la mirada en el norte» quedó nuevamente en un cajón.

Esto no solo habla mal de los partidos políticos, que prefieren siempre mirar hacia los conglomerados de Rosario y Santa Fe, sino también de los dirigentes del norte santafesino que no trabajan en pos de conseguir un lugar que permita discutir políticas públicas que satisfagan las necesidades de los que habitan esta parte de la bota santafesina.

Pese a todo esto, lo que llama la atención es el estruendoso silencio de los dirigentes del norte que se someten a las decisiones de los que gobiernan los partidos políticos desde un escritorio en Rosario o Santa Fe. Es momento de que la población se exprese para que en próximas oportunidades los partidos políticos o frentes tengan en cuenta a la región.

Es que la pasividad que muestran los dirigentes regionales es porque tienen asegurado para ellos un espacio local y poco les importa abandonar la comodidad para pelear por el desarrollo de la región. 

La indignación, que muchos de los lectores compartirán tiene responsables en el norte santafesino pero también en el sur. Los egoísmos de los sureños también los sufrimos porque parece que nadie está dispuesto a ceder un solo centímetro sus posibilidades personales que le permitirán recibir los beneficios de la «teta del Estado«.

Es momento de tomar una decisión como norteños y desde las bases deberá nacer algo nuevo que hoy no está siendo respetado por los que viven unos 200 kilómetros más al sur, pero ese castigo también debe aplicarse a los funcionarios, dirigentes y militantes de la zona que prefieren el silencio a salir perjudicados con alguna declaración.

Leonardo Rolón