EL PJ santafesino ya anticipa que no quiere cláusula gatillo para trabajadores

A pocos días del traspaso del mando provincial, el justicialismo viene denunciando un déficit que considera ha crecido considerablemente y la transición se empantanó completamente luego de la discusión por el Presupuesto 2020.

Fue el Senado (donde hay mayoría del PJ) el que impidió que sea el gobernador electo Omar Perotti el que arme el presupuesto y obligó a hacerlo a Miguel Lifschitz. Es que los senadores justicialistas temen que Perotti intente sacarles fondos que los socialistas le garantizaron durante estos años.

El llamativo silencio de Perotti, la falta de definición de su gabinete y la pérdida de liderazgo sobre el justicialismo está generando los primeros chispazos entre los propios y danzan por los distintos ámbitos las operaciones de supuestos nombres que nadie puede confirmar, de los que se dicen dentro del gabinete provincial.

En medio de esta situación están los empleados y los gremios que no consiguen un interlocutor válido para comenzar con las negociaciones paritarias para el 2020.

El gobierno ya anticipa que no está dispuesto a negociar con cláusula gatillo y pedirá a los gremialistas (la mayoría identificado políticamente por el justicialismo) un «pacto social» que contemplaría un aumento fijo que podría llegar a revisarse luego de pasado el primer semestre. Los gremios, por ahora, no aceptarían esa propuesta pero sin posibilidad de negociar con alguien solo les queda esperar y ver como pasan los días hasta el 10 de diciembre.

Los líderes del justicialismo, que hablan en nombre de Perotti, evitan como pueden hablar de aumentos para los trabajadores, cláusula gatillo e ingresos a la planta provincial.