A dos años de haber sido reelecta con más del 54 % de los votos, la intendenta de Vera, Paula Mitre, atraviesa uno de sus momentos políticos más incómodos.
Este domingo, su candidato oficial a concejal, Marcos Rubianes, quedó relegado al tercer lugar con apenas 2.030 votos. Lo superaron Claudio “Taca” Bieler (Más para Santa Fe), que cosechó 2.378, y Javier Barbona (Sumemos Esfuerzos), que encabezó con 3.221 sufragios.
El resultado no es menor: Barbona fue su principal rival en las elecciones ejecutivas de 2023, donde Mitre se impuso con 6.617 contra 5.145 del docente. Pero ahora, ese margen parece evaporarse.
El avance de Barbona empieza a dibujar un escenario en el que Mitre ya no controla con holgura ni el Legislativo ni las calles.
El oficialismo logró retener una banca, pero perdió otra, la de Nancy Senn. ¿Es una señal de desgaste en la antesala del 2027, cuando Barbona podría volver a disputar la intendencia con un caudal de votos más consolidado?
Mitre no debe estar demasiado satisfecha con el rendimiento de su espacio. El resultado deja ver un bloque oficialista más débil, una oposición en ascenso, y un Concejo con nuevas tensiones.