Las diez preguntas que aún nadie responde sobre el caso Vicentin

Cerca de las 17 del lunes 8 de junio, el presidente Alberto Fernández brindaba una conferencia de prensa en la que, sin advertir el hecho, comunicó la intervención, primero, y expropiación, después, de la empresa con base en el norte santafesino.

Noticia de: El Litoral (www.ellitoral.com)

Juan Chiummiento

El lunes 8 de junio, a poco de finalizar la hora del almuerzo, comenzó a correr la versión sobre un inminente anuncio presidencial respecto a Vicentin, la empresa que a causa de su “estrés financiero” había hecho estallar el mercado de granos en diciembre pasado. El rumor rápidamente se transformó en verdad, ya que cerca de las 17 Alberto Fernández brindaba una conferencia de prensa en la que, sin decir “¡agua va!”, comunicaba la decisión de intervenirla primero y expropiarla después.

 

Desde ese momento, el tema está en lo alto de la agenda pública. Con idas y vueltas sobre el proyecto inicial, hoy existen más dudas que certezas sobre el futuro de la agroexportadora. A continuación, se presenta un listado de diez preguntas sobre Vicentin, que hasta hoy nadie logra responder.

 

1. ¿Cómo fue que, en poco más de un año, el patrimonio de Vicentin se esfumó?

 

Es quizás el principal interrogante. No solo se lo hacen los cientos de productores que están sin cobrar, el Banco Nación o el gobierno santafesino, sino también el pool de bancos extranjeros que tiempo atrás pidieron un “discovery” a la Justicia de Nueva York. “El Consorcio necesita saber cómo desaparecieron cientos de millones de dólares”, plantean en el escrito, haciendo alusión a la soberbia diferencia que la compañía mostró según sus propios registros, que constan en la causa. Entre octubre de 2019 y febrero de 2020, Vicentin pasó de exhibir un patrimonio de 500 millones de dólares a uno de tan solo 33 millones.

 

2. ¿Dónde está el balance de 2019?

 

La pregunta anterior podría tener su respuesta en los estados contables correspondientes al ejercicio 2019, que la firma santafesina debió haber confeccionado antes del 28 de febrero de este año pero que aún no han salido a la luz. En el marco del expediente, hubo a principios de marzo una demanda de la corredora rosarina BLD para exigir su entrega, pero el juez no dio lugar al pedido. Al momento de solicitar el concurso, Vicentin había prometido entregar el balance “en cuanto (…) hayan sido tratados y aprobados por la pertinente asamblea”, pero ello jamás ocurrió.

 

3. ¿Por qué la misma Inspección General de Personas Jurídicas (IGPJ) no denunció oportunamente los incumplimientos de Vicentin?

 

Si había un momento para que el balance 2019 fuera tratado, ese era la Asamblea General Ordinaria que se celebró el 19 de marzo, que tuvo lugar a las 19 en la sede social de la empresa en Avellaneda. Sin embargo, el tema no figuró en el orden del día. Quien sí estuvo en esa jornada fue María Victoria Stratta, la titular de la IGPJ que fue la encargada de presentar el “plan Perotti” al juez Lorenzini. Aquel día la inspectora dio su conformidad, sin presentar objeción alguna.

 

4. ¿Qué motivó al gobernador santafesino a apoyar rápidamente el anuncio inicial del presidente, donde habló de la expropiación?

 

A las pocas horas de que Alberto Fernández sorprendiera a todos hablando del envío de un proyecto de ley para expropiar Vicentin, Omar Perotti hizo circular un audio donde manifestaba estar “acompañando este proceso, en resguardo de los intereses de todos los santafesinos”. Con el correr de los días, el titular de la Casa Gris iba a ser el encargado de bajarle el tono al conflicto, pero su apoyo inicial le valió no pocas críticas: por ejemplo, en las protestas del pasado 20 de junio, hubo pancartas alusivas (“Perotti traidor”, se pudo leer).

 

5. ¿Hubo cambio de discurso de Perotti o su plan fue siempre el mismo y Fernández lo desairó?

 

En las jornadas que siguieron al lunes 8, desde Casa Rosada bajaron el mensaje que lo anunciado en conferencia de prensa había sido charlado con el gobierno de Santa Fe, una versión que no fue desmentida por el entorno de Perotti. Sin embargo, lo que trascendió después fue que en realidad tanto el rafaelino como su ministro de Producción venían trabajando en otra dirección, más destinada a generar acuerdos entre privados que a promover la participación del Estado. Incluso más: varios de quienes participaron en reuniones virtuales esta semana con Perotti coincidieron que el gobernador no descarta la llegada de un inversor internacional, lo que chocaría con las intenciones de evitar la extranjerización del sector.

 

6. ¿Cuál es el verdadero rol de las sociedades offshore de Vicentin?

 

A propósito de empresas extranjeras, un aspecto sobre el que llamó la atención la IGPJ en su presentación judicial es el “complejo entramado societario” de la tradicional firma del norte santafesino. Según expresó Stratta, la compañía “parece controlar muchas más sociedades en las que en apariencia aparece como socia minoritaria”. Para Sergio Arelovich, economista y asesor del sindicato aceitero, esa red offshore es la que permitió girar dinero al exterior, a través de préstamos intraempresas de difícil fiscalización. La firma, por su parte, plantea que estas acusaciones son falsas: “Las denominadas despectivamente como triangulaciones son normales y corrientes”, se defendió a través de un paper que circuló esta semana.

 

7. ¿Por qué el Banco Nación siguió otorgando créditos a pesar de exceder las reglamentaciones vigentes?

 

En ese mismo documento que elaboró Vicentin se encuentra también su versión oficial sobre los créditos con el Banco Nación. Amén de repetir aquello que vienen sosteniendo desde diciembre (que la relación con la entidad es histórica y que era beneficiosa para ambas partes, porque la liquidación de divisas también se hacía allí), la empresa admite que “para abril/julio de 2019 la línea excedía en USD 30 millones las reglamentaciones” del Banco Central. Frente a ello -continúa- “BNA consultó al BCRA posibles medidas para lograr el encuadramiento”, pero las negociaciones no llegaron a buen puerto. Sin embargo, en noviembre, un mes antes que finalizara la gestión de González Fraga al mando de la entidad, el banco autorizó 28 créditos por 95,5 millones de dólares, en operaciones habilitadas “por vía de excepción” a través de un correo electrónico.

 

8. ¿Es correcto que Fabián Lorenzini siga llevando adelante el concurso, teniendo en cuenta que antes de ser juez fue abogado del Banco Nación y dictaminó sobre varias causas vinculadas al grupo Vicentin?

 

Más allá de las críticas que viene recibiendo el magistrado desde que el tema estalló en los medios nacionales (no solo del oficialismo, sino también desde otros sectores, que ponen la lupa sobre la resolución del viernes 19, cuando repuso al directorio y modificó un DNU del Poder Ejecutivo), lo cierto es que Lorenzini fue durante 20 años empleado de la sucursal Reconquista del Banco Nación. En su rol de abogado, dictaminó sobre temas vinculados al grupo, entre ellos Buyanor SA (dictamen 141 de fecha 27 de abril del 2018), Buogas Avellaneda SA (dictamen 210 de fecha 9 de octubre del 2018) y Renopacck SA (dictamen 218 de fecha 26 octubre 2018). Por estas horas, el presidente del directorio a nivel nacional Eduardo Hecker analiza impulsar una recusación.

 

9. ¿Por qué no apareció aún por Santa Fe Gabriel Delgado, el interventor designado por Alberto Fernández?

 

El nombre del funcionario nacional fue de las pocas cosas que cayó bien en el sector agropecuario aquel lunes. De buen diálogo con las entidades y respetado por su amplio conocimiento del mercado, el funcionario mantuvo silencio de radio las dos primeras semanas. En los últimos días brindó una entrevista a un medio porteño y estuvo en una videoconferencia con Perotti, pero su participación es más bien marginal. Habiendo sido una de las cartas fuertes que jugó Fernández en el anuncio, muchos dudan si Delgado finalmente recalará en Santa Fe o fue un simple bluff (engaño).

 

10. ¿Cuándo cobrarán los cientos de productores, corredores y acopiadores?

 

Sin dudas, es el principal interrogante. No solo desde los anuncios presidenciales, sino desde el pasado 5 de diciembre, cuando la empresa comentó su ya famoso “estrés financiero”. Mucha agua corrió por debajo del puente desde esa fecha, pero la pregunta sigue sin encontrar respuesta alguna.