En el marco del Plan del Norte, el ministro visitó los trabajos que avanzan en cinco frentes para garantizar agua de calidad a 170.000 personas de los departamentos General Obligado y Vera.
El ministro de Infraestructura y Transporte, José Garibay, junto al senador departamental Orfilio Marcón, recorrieron este martes las obras en ejecución del Acueducto Reconquista que abastecerá de agua potable a 32 localidades de los departamentos General Obligado y Vera.
“Este acueducto viene a saldar una deuda histórica con el norte provincial, garantizando agua de calidad para las poblaciones de General Obligado y Vera”, sostuvo Garibay.
“La obra –continuó–, se realiza en el marco del Plan del Norte y hoy se está avanzando en cinco frentes de trabajo en simultaneo, gracias al esfuerzo mancomunado entre los ministerios de Infraestructura y Transporte y de Economía, que conformaron una Unidad de Gestión, que logró conseguir financiamiento internacional”.
“Esta es la obra más importante del norte santafesino, estimamos que a fines del próximo año ya estaría culminada en todos sus ramales, con excepción de la quinta etapa, beneficiando a 32 localidades de los departamentos Vera y General Obligado”, finalizó Garibay.
La recorrida, de la que también participó la coordinadora del Nodo Reconquista, Erica Rubiolo, tuvo como objetivo evaluar el estado de avance de los cinco frentes de trabajo que hoy se están construyendo en el Acueducto y que consisten en:
>> ETAPA 1 – TOMA + ACUEDUCTO AGUA CRUDA => 65% de avance
>> ETAPA 2 – TOMA + ACUEDUCTO AGUA CRUDA => 23% de avance
>> ETAPA 3 – ZONA NUCLEO Y RAMAL OESTE (FORTIN OLMOS) => 14% de avance
>> ETAPA 4 – RAMAL SUR 1 – CALCHAQUI => 12% de avance
>> ETAPA 5 – RAMAL SUR 2 (LOS LAURELES) y NORTE (LAS GARZAS) => 00.2 % (iniciada en mayo de 2017)
ACUEDUCTOS
El sistema provincial de Acueductos consistente en el diseño y ejecución de un Sistema Provincial compuesto por 11 acueductos.
Este Sistema Provincial se diseñó sobre un horizonte de previsiones para los próximos 30 años y su desarrollo constituye una política de Estado.
Se busca, de esta manera, garantizar el acceso al agua potable de calidad en todas las poblaciones santafesinas, y es un proyecto que implica una inversión del orden de los u$s 1.500 millones.