Vergüenza en Brasil: la policía reprimió a hinchas argentinos antes de que comience el partido por eliminatorias

Esta noche 21.30 horas se jugaría el partido de eliminatorias sudamericanas entre Brasil y Argentina. El punto de encuentro es el Estadio Maracaná. Pero, antes que el árbitro de el pitazo de inicio, comenzaron los incidentes.

La policía brasileña comenzó a reprimir a hinchas argentinos mezclados entre los verdeamarelos. Dos mil personas con la celeste y blanca estaban rodeados por aficionados de Brasil. ¿Falla organizacional o fue adrede? 

Luego de cantar ambos Himnos Nacionales, la televisión mostró qué sucedía en las tribunas y los jugadores de la Scaloneta intervinieron. Todos (tanto titulares como suplentes) cruzaron los carteles que delimitan el fin del campo de juego a defender a sus compatriotas.

Lo Celso, Cuti Romero y Lautaro Martínez se treparon a las tribunas para pedirle a los policías que paren con la reprimenda. A su vez, rescataban a mujeres con niños que estaban llorando.

Los hinchas brasileros, a su vez, solicitaban lo mismo a los uniformados. Levantaron las manos para que no golpeen más. Cachiporras y asientos volaban por los aires. Una fuerza policial descontrolada e insensible. Un hombre salió en camilla, descompensado por los golpes; otros saltaron al campo de juego para evitar el descontrol. Algunos más lloraban. Un verdadero de-sas-tre.

¿Hasta cuándo pasará esto? No es la primera vez; el 4 de noviembre pasado los hinchas de Boca habían sufrido violencia de parte de los mismos de siempre. 

Argentina no puede disfrutar de un partido de fútbol en Brasil porque es golpeada.

Una verdadera vergüenza. Ojalá CONMEBOL actúe de una buena vez y sancione a quienes corresponda. Lo hace en Argentina cuando se cruzan las hinchadas y hay «actos de racismo» que derivan en sanciones millonarias.