Con una medida largamente esperada, Santa Fe se convierte en la segunda provincia del país en contar con una ley específica reglamentada para la protección de humedales. Se trata de la Ley N.º 13.932, cuya reglamentación impulsa herramientas concretas para conservar, monitorear y gestionar de manera responsable estos ecosistemas vitales para el equilibrio ambiental.
Los humedales cumplen funciones esenciales: regulan el ciclo del agua, actúan como filtros naturales, y son hábitat de una enorme biodiversidad. Con la nueva normativa, se crea el Inventario Provincial de Humedales, que permitirá identificarlos y caracterizarlos con distintos niveles de detalle, y se amplía el Sistema de Áreas Naturales Protegidas, que ya sumó más de 1.100 hectáreas en el último año.
También se implementará un Plan de Monitoreo Ambiental que evaluará en forma continua la calidad de agua, suelo, flora y fauna, con parámetros químicos y biológicos que permitirán un seguimiento riguroso del estado de estos territorios.
Una mirada a largo plazo
La reglamentación no se limita a la conservación: la gestión de los humedales se integra a las políticas de adaptación y mitigación del cambio climático que lleva adelante la provincia. Durante 2024 ya se avanzó en la planificación territorial en varias localidades del norte y sur santafesino, incorporando criterios ambientales en el diseño urbano y productivo.
Además, se proyecta un ordenamiento del uso del suelo que contemple la presencia de humedales y establezca límites claros a las actividades que puedan afectarlos, priorizando formas de ocupación sostenibles. Esto se realizará en conjunto con municipios y comunas.
La normativa también impulsa la educación ambiental, con la creación de contenidos específicos sobre humedales que estarán disponibles para instituciones educativas y el público general. Y establece que todo proyecto que pueda impactar en el ambiente deberá presentar su Estudio de Impacto Ambiental, de acuerdo a las leyes vigentes.