Lo anunció el primer ministro Dmitry Medvedev e incluye a todos los ministros. Fue después de que el presidente pidiera a la Duma profundas reformas al sistema político ruso
Fuente: Infobae.
El gobierno ruso por completo presentó este martes la renuncia, luego de que el presidente Vladimir Putin pidiera al parlamento que encarara profundas reformas políticas entre las que se encuentran la forma de elección del primer ministro. El anuncio lo realizó Dmitry Medvedev, el hombre más cercano al jefe de estado, quien también ha dado un paso al costado y pasará a ser Subsecretario del Consejo de Seguridad, un cargo que aún no existe y que será creado a su medida.
El mensaje de Putin fue pronunciado en el tradicional discurso de Estado de la Nación y en él pidió que la Duma apruebe cambios sensibles para la vida política del país. Entre ellos, propuso convocar un referéndum sobre cambios constitucionales que deberían concretarse para la posterior reforma. Luego de aceptar sus dimisiones, Putin les informó a sus ministros que mantendrán sus puestos hasta tanto se anuncien sus reemplazantes.
La movida inesperada de Putin
Putin, propuso convocar un referéndum en el que los rusos votarían una serie de cambios constitucionales, entre ellos la concesión de mayores poderes a la Duma o Congreso de los Diputados. “Considero necesario celebrar una votación entre los ciudadanos del país sobre todo el paquete de enmiendas a la Constitución de la Federación Rusa”, dijo Putin durante el discurso sobre el estado de la nación.
Al término de su intervención, la Comisión Electoral Central se mostró dispuesta a convocar cuanto antes dicha consulta, que podría coincidir con las elecciones legislativas de 2021. Al dirigirse a ambas cámaras del Parlamento en el principal centro de exposiciones del país (Manezh), Putin propuso que a partir de ahora la Duma vote la candidatura del primer ministro, cuando hasta ahora se limitaba a dar el visto bueno.
Lo mismo ocurrirá con los viceministros y el resto de miembros del Ejecutivo, prerrogativa que la oposición había demandado durante los últimos años. Sea cual sea la decisión de la Duma, agregó, el jefe del Kremlin no puede rechazarla, aunque seguirá conservando el derecho de destituir al Gobierno.
También seguirá disponiendo de la potestad de nombrar a los jefes de los servicios de seguridad y dirigir a las Fuerzas Armadas. Al mismo tiempo, subrayó que las enmiendas no acarrearán una reforma en profundidad de la Constitución presidencialista promulgada en 1993 tras un grave enfrentamiento entre el entonces presidente, Boris Yeltsin, y el Parlamento.