Imputaron a la inspectora municipal por estafar a jubilados

Vanina Gisela oliva, 43; domiciliada en calle Independencia al 1151 de Reconquista, empleada municipal al servicio del estacionamiento medido con Parquímetros, fue imputada por los delitos de estafas reiteradas en concurso real, artículos 172, 173 inciso 15, 55 y 45 del Código Penal.

La audiencia fue este lunes 13 de julio de 2020, en la sede del Ministerio Público de la Acusación, Iriondo 553, y del trámite se ocupó el fiscal Rodrigo González.

La imputada contrató los servicios del abogado particular Gabriel Micheloud; y como querellante de una de las víctimas participó el abogado Roberto Pagura, hijo de Juan Pagura, uno de los jubilados estafados.

Primer hecho:

El fiscal sostuvo que el primer del que tiene conocimiento, ocurrió el día 4 de abril de 2020 en el cajero automático del Nuevo Banco de Santa Fe, ubicado en calle San Martín y Patricio Diez. Cuando Maria Delia Batistuta se encontraba en la fila para entrar al cajero, «usted, aprovechando la función que estaba cumpliendo como empleada municipal, controlando el cumplimiento de la distancia social, se acercó a Batistuta y se ofreció a colaborar, momento que aprovechó mediante maniobras de engaño para copiar el PIN y usted sacó un crédito por $240.000.- a nombre de la víctima», le reprochó el fiscal.

Segundo hecho:

Ocurrió el día 17 de junio de 2020 en el mismo cajero, cuando «en el momento que Ramona Luján Roda se encontraba en la fila para acceder al cajero, usted aprovechándose de la función que estaba cumpliendo, se acercó a Roda y le ofreció su colaboración para la extracción y aprovechó mediante maniobras de engaño para copiar su PIN y luego para intercambiar la tarjeta de débito por otra que usted poseía a nombre de Andrea Fabiana Ortiz, y luego, con la tarjeta y el PIN de Roda, usted sacó un crédito de $100.000.- a nombre de la víctima».

Tercer hecho:

Ocurrió el día 1 de julio de 2020 cerca de las 17:00 horas en el mismo cajero automático. «En circunstancias en que Juan Domingo Pagura se encontraba en la fila para entrar al cajero, usted aprovechó la función que estaba cumpliendo como empleada municipal controlando el cumplimiento de la distancia social, se acercó a Pagura y lo hizo ingresar directamente manifestando que era una persona de riesgo, y en momentos de realizar Pagura las operaciones de extracción, aprovecho mediante maniobras de engaño para copiar el PIN y luego le intercambio la tarjeta de débito por otra que usted poseía a nombre de Ramona Luján Roda, y luego teniendo la tarjeta y el PIN de Pagura, usted sacó un crédito de $100.000.- a nombre de la víctima».

ALLANAMIENTO Y APREHENSIÓN

Además el fiscal le hizo saber a Vanina Oliva que de la requisa realizada en su domicilio el 03 de julio de 2020, le secuestraron 2 celulares y la suma aproximadamente de $100.000.-, y que dejó en su poder en carácter de depositaria judicial, una pava eléctrica; un horno eléctrico; una cocina de 4 hornallas; un aire acondicionado y un equipo de computación. Tomando fotografías de las boletas de compras de los electrodomésticos todos posteriores a la fecha de las estafas.

SILENCIO

La empleada municipal acompañada por su abogado particular se limitó a escuchar la imputación sin aceptar decir nada para defenderse.

Vanina Gisela Oliva, 43, fue aprehendida por unas horas y luego liberada, el viernes 03 de julio de 2020. Ese día también allanaron su domicilio, en Bulevar Independencia Nº 1151 de la ciudad de Reconquista, en el marco de una investigación por estafas reiteradas en perjuicio de jubilados a los que se ofrecía a asistir en el cajero del Banco de Santa Fe, donde operaba con la casaca que la identificaba como empleada municipal.

El testimonio de uno de los estafados

Juan Domingo Pagura, 72, jubilado como trabajador de Vialidad Nacional, contó en ReconquistaHOY que fue a retirar dinero al cajero del Banco de Santa Fe ubicado frente de la Unidad Regional IX de policía, y cuando estaba en la cola de unas 15 personas, una inspectora del parquímetro se le acercó y le dijo que no debía hacer fila, ya que él es persona de riesgo, y lo hizo pasar directamente al cajero, donde entró con él. Cuando puso su clave, ella le dijo que había puesto un número más, retiró dinero con su tarjeta y también con la de su esposa y se marcharon previo agradecerle la amabilidad. Aún ni imaginaba que le había cambiado la tarjeta y que ya había tomado cuenta del PIN cuando le hizo repetir la maniobra.

Cuando llegue a mi casa, empecé a pensar en lo que pasó con esta señora, le dije a mi mujer esta señora me jodió.

Contó que esa misma noche al sospechar pensó regresar al cajero, pero lo dejó para el día siguiente, cuando comprobó que ya no podía extraer porque en realidad tenía en su poder la tarjeta de otra persona, de Roda Ramona Luján .

Acudió al banco donde le advirtieron que con su tarjeta habían sacado un crédito por $100.000.-

Luego fue a la oficina de Parquímetros de la Municipalidad, donde contó que lo habían estafado y en la foto de un celular reconoció a la autora, que efectivamente pertenece al staff. Indignado confesó que precisamente por eso confió y la dejó permanecer con él en el cajero.

De esa oficina municipal fue a realizar la denuncia en la PDI.