El día jueves 1 y viernes 2 de febrero la Agencia de Seguridad Alimentaria (ASSAL) con la colaboración de la Guardia Rural Los Pumas sección 26 procedió a la Clausura de dos carnicerías, ambas ubicadas sobre calle 47, propiedad de R. Cucit y A. Fernández, respectivamente.
Encontraron carne porcina, sin sellos sanitarios, sin inspección veterinaria oficial y sin documentación reglamentaria que respalden la procedencia, expuestas para la venta.
«Los animales que son destinados para el consumo humano, indefectiblemente deben ser sometidos a diferentes controles sanitarios, ya que se debe garantizar que la carne que se exhibe para la venta no represente un riesgo para la salud de la población», justifica ASSAL.
El total de productos cárneos secuestrados fue de 180 kilogramos. Fueron desnaturalizados en los comercios de referencia y trasladados en el vehículo policial a los digestores del frigorífico local para su disposición final.
